sábado, 27 de abril de 2013

Hoy he ahogado mi vida en uno de esos vasos
y las penas flotaban alrededor de la ginebra.
Pero me las he bebido todas de un trago.

Puedes tener la azotea más bonita en tus ojos
pero no me gusta matarme contigo.
Ni tampoco morirme por ti.

-Que mirada tan profunda, ¿cuándo deja de llover?
Hace más de un año que ya no llueve
y ahora me mete mano la primavera.
Llamémosle cambio climático
o cambio de prioridades.

Coge las maletas y vamos a seguir evitándonos.
A esta vocación de suicida potencial
la maté junto a ti.
Pero esta asesina no va a volver al lugar del crimen.

Ahora que estoy manchada de poesía,
haciendo de la vida un vicio más,
ahora que los minutos me parecen carreras,
que sonreír es sinónimo de correrse,
búscame en cualquier libro
porque
ahí
es
donde
me
maté
yo


(pero recuerda que no fue por ti)


No hay comentarios:

Publicar un comentario