Declaro este cuerpo
como zona catastrófica
por efectos ajenos a mí misma.
Me considero muy dueña de mis actos
pero muy prole en mis afecciones.
Declaro este cuerpo como zona catastrófica,
como fuente de accidentes personales,
y aquí te entrego mis ojos de mujer fatal.
Lámelos.
Dámelos.
Que quiero joder contigo cualquier técnica de aprendizaje,
y decirte que me sobran agallas para plantarme en medio de tu caos incivil
y gritarle a tus idiosincrasias.
Declaro este cuerpo
como zona catastrófica
y a esta mente como volcán
de rebeldía insana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario